viernes, 8 de agosto de 2008

Las suculentas...plantas maravillosas.


Tal vez solo las suculentas muestren tanta variedad de formas, geometrías, reflejos y colores...que en una pequeña maceta de ocho cm de diámetro...puede formarse todo un jardín de color y vida.

El objetvo de este blog, es ir conociendo poco a poco, a estas plantas resistentes y prolíficas, que tanto nos apasionan.

También veremos distintas formas de combinarlas y embellecerlas para decorar distintos rincones de nuestra casa.

Una especie por vez, con sus características y recomendaciones para cultivarlas y que crezcan, fuertes y sanas.

Sus requerimientos no son muchos, pero si necesitan de una atención constante...como todas las plantas.

Las suculentas (plantas muy nobles) pueden adaptarse a distintos tipos de substratos, pero prefieren aquellos que proporcionana un buen drenaje. En general pueden usar cualquier substrato para cactus o suculentas. Más adelante hablaremos más en detalle sobre este punto.

La recomendación más importante sobre las suculentas es sobre el riego. Tendemos a regar en exceso las plantas...algunas plantas lo toleran...para las suculentas es fatal.

El riego solo debe efectuarse cuando el substrato esta completamente seco. Una buena recomendacion general es observar tanto la superficie como el fondo de la maceta y corroborar que la tierra está bien seca. En general las suculentas toleran perfectamente riegos espaciados, cada quince días. Claro está dependiendo de la temperatura y exposicion solar.

Un detalle importante a tener en cuenta...es que cuando una suculenta pareciera que se está muriendo por falta de agua en general lo que ocurre es que las raíces se están pudriendo por... exceso de agua. Entonces, la planta se muere porque las raíces no pueden cumplir su función...y por lo tanto la planta no puede absorber agua y minerales. Paradójicamente todo esto ocurre por el exceso de riego que las suculentas toleran mal.

La mayor parte de las veces, puede salvarse la planta lavando las raíces con agua de canilla, cortando y retirando las partes podridas y dejándolas al aire en un lugar bien aireado sin exposición directa al sol (por ejemplo en una maceta sin tierra, o sobre la tierra en cualquier maceta en media sombra), en pocos días crecerán nuevas raicillas y podremos volver a plantar en un sustrato arenoso.

Hasta la próxima...

Lionel

El elfo vive en el bosque como el bosque vive en el elfo

1 comentario:

ViLmus dijo...

El primer párrafo de tu entrada es una belleza de gran verdad. Saludos